Sobre la Psicología Deportiva

Información relevante

Sería conveniente dar unas pinceladas a lo que es la psicología deportiva, ya que en mi experiencia no son pocas la personas que me han preguntado ¿qué hacéis los psicólogos del deporte?

Para empezar diría que la psicología es una ciencia, la ciencia de la mente, y que por lo tanto la psicología del deporte es la ciencia de la mente aplicada al rendimiento humano. Hablamos de mente sana, de lo contrario estaríamos hablando de psicología clínica o sanitaria (que desafortunadamente es con lo que se confunde a la psicología deportiva). Visto así, se entiende que para ejercer como psicólogo/a deportivo hay que conocer los fundamentos teórico-científicos que giran en torno a esta especialidad tan apasionante.

Algo de historia de la psicología deportiva

Al igual que ocurre con la carrera de psicología (en España se fundó la primera facultad en el año 1980), la psicología del deporte es un área muy reciente de la psicología en sí, siendo de algún modo los últimos en llegar al mundo del alto rendimiento deportivo (tras otros expertos como son los preparadores físicos, los fisioterapeutas deportivos, los biomecánicos, o los nutricionistas deportivos). Se podría decir que los pioneros de la psicología del deporte eran aquellos afortunados que trabajaban con deportistas de alto rendimiento, y que viajaban a competiciones internacionales con sus respectivos equipos en los años 60/70. La mayoría eran norteamericanos (con permiso de los soviéticos).

El entrenamiento mental

En 1977 dos psicólogos deportivos de EE.UU entrevistaron a atletas que compitieron en los trials (el campeonato de EE.UU de atletismo previo a los Juegos Olímpicos y donde se decide quienes representarán al país). El análisis de las entrevistas llegó a unas conclusiones reveladoras; aquellos que conseguían medalla se diferenciaban de los que no en que los primeros se concentraban mejor, gestionaban mejor la presión y tenían más auto-confianza. A partir de este tipo de estudios se comienza un trabajo más específico con los deportistas a mejorar estas y otras variables psicológicas que se empezaban a relacionar con un mejor rendimiento.

La psicología del deporte actual

Mucho se ha avanzado en la psicología deportiva en la actualidad, abordándose distintas temáticas más allá del entrenamiento mental en el alto rendimiento (como pueden ser el asesoramiento a entrenadores, la dinámica de grupos o el liderazgo), y extendiéndose a otros ámbitos como son la participación en el deporte base, el fitness y otros tipos de actividad física incluido el amateur. Igualmente, el formato de trabajo que realiza a nivel psicológico es aplicable a cualquier otra faceta del rendimiento humano, dado que al final se trabajan las mismas variables psicológicas, tal y como puede ocurrir en el caso de un músico, un empresario o un cirujano.

No es oro todo lo que reluce

La psicología no está exenta de “nuevas” y prometedoras técnicas, aseveraciones o soluciones rápidas cuyos resultados parecen ser infalibles. Los “todo está en la mente”, “querer es poder” u orientarlo todo desde una pseudo psicología donde todo es un camino de rosas, simplemente, carecen de fundamentación científica y se alejan de la realidad. De igual modo, se están popularizando técnicas específicas que, aunque tienen una base científica probada, se venden como “herramientas multiuso” y que sirven para casi todo. Dos ejemplos pueden ser el interés que despierta todo lo que empieza por neuro, que aun deslumbrando al ciudadano de a pie, su evidencia en materia de rendimiento humano se antoja muy limitada y, a mi entender, todavía cuenta con numerosas lagunas metodológicas.

Otro ejemplo supone todo lo referente a “fluir” (Flow), que parece estar cobrando gran relevancia en aquellos que apuestan por las soluciones rápidas para alcanzar experiencias óptimas de rendimiento. La realidad es que la fluencia es un estado alterado de conciencia que, aun habiendo sido estudiado en psicología del deporte (yo mismo he aportado mi granito de área en ese ámbito), se trata de un fenómeno elusivo a la evidencia y que todavía estamos lejos de comprender.

Concluyendo

Dicho lo anterior, un trabajo riguroso en materia de psicología deportiva debe orientarse desde tres ejes fundamentales en mi opinión:

  • En primer lugar, hay que conocer las teorías que sustentan las diferentes variables psicológicas que están relacionadas con el rendimiento humano. Tales teorías explican el comportamiento humano en contextos de rendimiento, como pueden ser el establecimiento de objetivos, el control de los auto-diálogos, el manejo de los recursos atencionales, la gestión de la presión o el control del nivel de activación.

 

  • En segundo lugar, hay que conocer lo que nos dicen las investigaciones aplicadas con respecto al desempeño psicológico humano. Dichas intervenciones orientan al profesional de la psicología del deporte en relación con las pautas (probadas) a seguir si se quieren conseguir los resultados deseados.

 

  • En tercer lugar, será la experiencia del psicólogo deportivo a la hora de establecer una relación adecuada con su cliente, basada en el respeto mutuo y una consideración positiva, la que determinará el crecimiento mutuo y la orientación hacia la consecución de los objetivos establecidos para el cliente. Este proceso suele incluir una visión amplia y flexible (holística), considerando la heterogenia de técnicas y métodos (ecléctica), y fundamentada en los valores de la trascendencia y la existencia humana.

Autor:

© Todos los derechos reservados. Samon Psiquiatría.

Información relevante
25 Jun
Información relevante
3 Jun
Información relevante
13 Feb
Información relevante
13 Feb